(version 1.1, suave)
Hubo una vez en un mundo olvidado una princesa bellisima, tal era su belleza k todo hombre k la veia kedaba prendido de su amor,y por mas k intentase olvidarse de ella, al final acababa enlokeciendo de amor por ella.La princesa, nunca habia conocido el amor, porque cualkiera k intentase demostrarselo,no sentia un amor sincero, sino una especie de hechizo k le empujaba a la muerte, ya fuese por celos o por pura rabia,y que en su corazon no cupiese mas anhelo, Por no conocer lo k era el amor, la princesa nunca sintio la necesidad de enamorarse,y nunca supo lo k era Un dia cualkiera, de los k la princesa paseaba por los jardines de palacio, se encontro con un jardinero, k estaba podando las rosas rojas de los jardines
-Buenos dias -dijo la princesa.
-Buenos dias princesa-respondio el jardinero, reconociendo la voz de la princesa, corto una rosa y se la tendió haciendo una reverencia.
-Porque no me mirais a los ojos, inquirió la princesa sorprendida.
-SoY ciego princesa. Seria frustrante alzar la mirada para contemplar vuestra hermosura y solo ver la oscuridad de mis ojos negros La princesa quedo muy aturdida y a la vez interesada por el hecho de k ese jardinero fuese el primero en no caer ante sus encantos,y despues de una agradable conversacion volvio a su alcoba a pensar sobre ello.Al dia siguiente volvió para poner a prueba al jardinero.
Con la intencion de que se imaginase la cara de la princesa en su mente la princesa ideo un plan.Le dijo con sincera y convincente voz.
-Tu k trabajas dia tras dia con tus manos las rosas, quisiera que perfumases mi rostro con tus manos. Acariciame hasta k quede perfumada.
Asi lo hizo el jardinero, que estupefacto ante tal peticion, hizo el trabajo con mucho esmero, hasta dejar perfumada la cara de la doncella.Cuando acabó, el rostro de la princesa desprendia un perfume de rosas k nunca desapareció.
Entonces la princesa le preguntó, cuan guapa le parecia, y el respondio:
-Ojala mi ojos me permitieran observar su cara solo un segundo…. pero no es asi, princesa mia, y por tanto no puedo saber cuan bella es la princesa.
Volvio la princesa a su dormitorio buscando la solucion para enamorar a su jardinero,pero cuanto mas pensaba en una solucion, mas pensaba en su jardinero, y asi fue pasando la noche hasta el punto de k se durmio y soño con su jardinero, soño k ella era una flor,y el acariciaba su cuerpo desnudo, y k este disfrutaba con su cuerpo,lo moldeaba n sus manos igual k una rosa roja.
Y asi a la mañana siguiente tuvo una idea. Se dirigio al jardinero y le pidio que si le podria acompañar a su dormitorio, para plantar unas rosas rojas en su jardin interior. El jardinero inconsciente de las ideas de la princesa se encamino junto a la princesa a sus aposentos y una vez alli la princesa le hablo tiernamente, disimulando su verguenza,y entonando un tono seductor.
-Jardinero, necesito que pasees tus manos por mi cuerpo, k lo moldees igual k hiciste cn mi rostro, para asi perfumarlo con el olor a rosas que desprendes.Dicho esto la princesa se despojo de su unica prenda, una blusa roja, y quedo completamente al desnudo.
El jardinero,algo cohibido por la situacion, pero seducido por la voz de la princesa, y el sonar de la blusa al caer al suelo, decidio hacerlo, pero no sin olvidar su profesionalidad, moldeo el cuerpo de la joven princesa,empezando por su cuello,bajando por sus firmes senos y con suavidad, los cubrio en su totalidad cn cada mano, moldeo su cintura y arrastro sus dedos hasta su culo respingon, donde apreto sus dedos, para dejar marca de su aroma, continuo por sus piernas, ocupandose de cada una por separado, primero por fuera y luego por dentro y fue bajando hasta la rodilla y hasta los tobillos.
Al salir de su ensimismamiento, el jardinero se ruborizo y pidio permiso para salir.
-Podras salir nada mas respondas a esta pregunta, cuan bella te parezco? Lo mismo k la mañana anterior respondio el jardinero:
-Ojala mis ojos me permitieran observar su cuerpo solo un segundo….pero no es asi, princesa mia, y por tanto no puedo saber cuan bella es la princesa.
Malhumorada por la respuesta pasó la noche siguiente en vela intentando buscar una manera de enamorar al jardinero, pero cada vez k pensaba en él algo revoloteaba por su estomago,le quemaba y tenia la necesidad de desahogarse, se excitaba y tuvo k hacerse el amor a si misma para sacar de si este sentimiento. La princesa se estaba enamorando sin darse cuenta.
Cuando hubo satisfecho su placer, fue cuando se le ocurrio otra idea, aun mas atrevida.
Nada mas empezar el turno del jardinero, la princesa ya estaba alli esperandole, para encandilarle cn su nueva idea.
Al igua
l k el dia anterior la princesa pidio al jardinero k le acompañase a su dormitorio y ahi hablo cn el jardinero
-oh jardinero, necesito un ultimo favor k pedirte, necesito k me perfumes por dentro de mi cuerpo.
El jardinero extrañadisimo, solo se le ocurrio preguntar, como pretendia k el hiciese eso.
-Haciendome el amor respondio la princesa con entusiasmo.Se desato el albornoz y lo dejo caer al suelo quedando completamente desnuda, se aproximo al jardinero y comenzo a desnudarle,marcando su respiracion en su oreja,le quito la camisa, boton a boton, sensualmente para intentar excitarle.Cuando akabo cn la camisa, bajo hasta poner su cabeza a la altura de la cintura de este y desabrocho su pantalon con la boca, cn apasionada lentitud fue tirando de sus calzoncillos hasta dejar al jardinero desnudo.
El jardinero en un ultimo intento de buscar logica a esto, pregunto:
-Estas enamorada de mi? La princesa confusa por la palabra amor, kedo pensativa durante unos instantes, y la luz llego a su alma como las palabras a su boca y, respondiendo cn seguridad, dijo:
– Si que lo estoi,estoy enamorada de ti.Nada mas decirlo una pasion broto del cuerpo de ella como un hielo k se derrite en el fuego, una llama k coje fuerza hasta convertirse en incendio. Cayeron bruscamente sobre la cama, el encima de ella, la penetro en un espasmo de placer infinito en el tiempo por parte de los dos.Durante toda la noche hicieron el amor, y durante cien noches siguieron, sin parar, una y otra vez, hasta k sus cuerpos no dieron mas de si.Durante toda la noche él la inundo de su perfume, de su olor a rosas rojas, pero la inhundo por dentro, lo k provoko una transformacion del corazon de la princesa,no mejoro en belleza exterior pero si en bondad y simpatia, en generosidad y ternura, al igual k un jardinero trata a su flor,el sexo trato el corazon de la princesa y desde entonces nunca mas volvio a enlokecer a nadie por su belleza.Igualmente durante el tiempo en k hicieron el amor ella moldeo el cuerpo del jardinero con su belleza le embadurno en un sudor puro por todo reskicio de su piel, purificandola, suavizandola, y curando todas sus heridas, tal fue el rejuvenecimiento k el jardinero recuperó su vista, y cuando abrió sus ojos lo primero que vio fue a su princesa, a la que le dijo:
-Yo tambien te amo.
FIN
Autor: kaneda
kanedaki ( arroba ) hotmail.com