Desde pequeño le he gustado a mi prima. Estaba loquita por mí, mientras que ella no me gustaba a mí. Era guapa, pero muy, muy delgada. No hablaba conmigo casi nunca, porque se ponía roja. Fuimos creciendo y como no me fijaba en ella, ella empezó a fijarse menos en mí. Ya hablábamos normalmente y nos íbamos llevando, según pasaban los años, muy bien. Pero ella físicamente estaba cambiando hasta convertirse en la chica que es ahora: alta, delgada, pero tiene donde coger. Unas tetas normalitas y el segundo mejor culo que he visto en mi vida. Por esto a mi, cada vez me ponía más. Además como me lo contaba ya casi todo me hablaba de sus ligues, que con lo buena que estaba, eran muchos y además de sus experiencias sexuales, que según me contaba le encantaba el sexo y probar de todo. Palabras de ella: "Soy un poco puta".
Me ponía a cien. Anda que no me hice pajas pensando en ella.
Hace tres años se echó novio y lo dejaron hace un año. Yo la ayudé a que lo fuese superándolo. Me la llevaba de fiesta, quedaba con ella para hablar, pero nunca intentaba nada. De pronto ella empezó a estar tímida de nuevo conmigo. Me hablaba poco y cuando lo hacía se ponía roja, me miraba mucho. Me acordé de cuando era pequeña y me gustaba que actuara igual, y decidí comprobarlo.
Me enteré que esa tarde iba a estar sola en casa y fui para allá. Iba a intentar que la parte «puta» que tenía mi prima la sacase conmigo. Era verano con lo que me abrió la puerta con un pijamita muy pequeño. Nos saludamos con dos besos, hablamos un rato, aunque ella estaba muy cortada y la pedí que me diese un masaje. Me quité la camiseta y me tumbé en la alfombra del salón. Se subió encima y empezó a masajearme. Le pregunté:
– ¿Te acuerdas de cuando éramos pequeños?
Nos contamos aventuritas y le dije:
– Me acuerdo que de pequeña estabas loquita por mí.
Ella se rió nerviosamente.
– Anda que si ahora te gustase…Porque eres mi prima, sino no te me escapabas viva. Aunque hay veces que pienso que por una vez no pasaría nada por hacer algo.
Ella seguía callada y los masajes empezaron a ser más cariñosos. Como caricias más que masajes. Después me hizo cosquillas, me revolví y se las hice yo a ella también. Estábamos revolcándonos hasta que nos quedamos medio abrazados y me dijo:
– Venga, no me dejes escapar viva.
Nos besamos apasionadamente, mi mano fue a lo que más me tenía obsesionado de ella. Ese pedazo culo que tenía. Le quité la parte de arriba del pijama mientras le besaba el cuello y después el sujetador. Le lamí sus tetas y me las metía en la boca enteras ya que no eran muy grandes. Iba lamiendo más abajo, hasta que le quité la parte de abajo del pijama y el tanga que llevaba. Como me contaba, tenía el coño totalmente depilado.
– Me gusta más que haya un poco de felpudito. (Me hizo caso porque es como lo lleva ahora. Lo sé no porque me lo haya contado).
Se lo lamí entero. Abría los labios con mis dedos y le metía la lengua lo más profundo que podía.
– Déjame ver lo que me ha obsesionado estos años.
La puse boca abajo y vi su culo. Las cachas eran redonditas y eran perfectas para mis manos. La mordí suavemente en cada cachita.
– MMM, que mordisquitos más buenos.
La parte "guarra" de mi prima estaba ya fuera y era un ciclón.
Me quitó los pantalones y me empezó a chupar la verga. Era muy buena. Después de un rato me apetecía llevármela a una cama, pues seguíamos en la alfombra. La cogí en brazos y se la metí por el coño. Me la estaba follando de pie mientras íbamos a la habitación. Ya allí se la metí unas cuantas veces más apoyando su espalda en la pared y la dejé en la cama.
Se abrió de piernas y me dijo: vamos que llevo esperando esto muchos años (ella tenía en
ese momento 23 y yo 24, que se me olvidó decirlo).Que ya estaba harta de masturbarme pensando en ti.
– Yo llevo ya también un tiempo haciendo solitarios a tu salud.
– Que gilipollas hemos sido. A aprovechar el tiempo perdido.
Me puse un condón y nos pusimos en la posición del misionero. Sin sacarla se puso ella arriba y vaya forma de mover la cintura. Mi primita follaba como toda una puta. Me cabalgó de una forma increíble. Me incorporé y mientras nos follábamos empezamos a besarnos y le chupaba las tetas.
La puse en pompa y se la metí por el coñito. Vi su culo y dirigí mi miembro al agujero que me había obsesionado durante unos cuantos años. Sabía que no se iba a oponer porque cuando nos lo contábamos casi todo ya me dijo que la habían cogido ya el culo varias veces.
– Bueno primita voy a realizar algo con lo que he soñado y me he pajeado mucho.
– Todo tuyo.
Me quité el condón y despacito fui empujando mi verga por su culo. Gritaba un poco. Una vez que estaba la polla entera dentro, esperé a que su ano se dilatase y ya empecé a empujar. La imagen de mi polla taladrando esa maravilla de culo me puso muy cachondo, con lo que me entraron ya las ganas de descargar mi leche. Aumenté de ritmo para gozar su culo lo máximo posible y me corrí dentro. Fue el mejor orgasmo de mi vida. No solo porque fue un gran polvo, sino porque la idea de que me estuviese follando a mi prima, algo que yo veía como algo imposible, por ser familia, con lo que me puso más cachondo. A ella según me dijo le pasó lo mismo.
– Con la emoción no he podido disfrutar mucho de tu culo.
– Es tuyo. Te cambió mi culo por tus labios. Tú podrás disponer de mi culo cuando quieras y yo de esos labios. Porque como chupas y como besas.
Cuando me recuperé me la follé solo por el culo.
Desde esa primera vez hasta ahora, hemos follado varias veces, aunque sigamos con nuestros ligues (yo tuve una novia que duró 4 meses y mi prima y yo seguíamos) destacando una vez que lo hicimos en el hospital, otra en la piscina del chalet de mis tíos con mis tíos y mis padres muy cerca y sobre todo dos: tengo una prima cojonuda y ella ha hecho posible otro de mis sueños sexuales, un trío. Una vez con otra prima que también estaba por mí y que está ahora casada (24 años como yo); y el segundo trío con una amiga suya. Ya lo contaré.
Espero que les haya gustado.
Autor: Jcysx24 jcysx24 (arroba) hotmail.com