Gay, trío, exhibicionismo. Un recuerdo maravilloso de su paso por Acapulco junto a un sensual chacal.
Hola, mi nombre es Alan, tengo 27 años, soy sonorense, mido 1.78,peso 74k,
ojos verdes, y cabello café, si tienen algún comentario sobre este relato, o
quieren intercambiar fotos o anécdotas, por favor dirigirse a:
alanntoledo (arroba) hotmail.com
Todo empezó en Acapulco, queriendo salir de mi rutina habitual, volé desde
Hermosillo a esa paradisíaca playa, por consejo de mi agente viajero, me
hospede y como era mi primera vez que visitaba
ese lugar, ignoraba que bajando las escaleras se encontraba una de las más
famosas playas gay mexicanas.
Paso unos días muy divertidos visitando todos los lugares de rigor, pero fue
hasta el cuarto día que después de salir del alebrije, entre a un barecito
gay donde los Strippers bailaban totalmente desnudos y con tremendas vergas
en erección, que se dejaban manosear sin ningún pudor, y hasta te invitaban
a un privado, no se si para que les dieras una mamada o que te pegaran una
culeada.
El caso que entra al bar un hombre con el clásico aspecto de chacal
cachondo, debería de haber medido 1.78, moreno, de aspecto guapetón y de
cuerpo delgado pero atlético me imagino que por el trabajo. y con una mirada
y sonrisa muy cínica se me acerca y me pide un cigarrillo, al momento de
dárselo y como andaba un poco pasado de copas se me hizo fácil agarrale el
paquete, el me miro y volvió a sonreír, y se sentó en la silla de enseguida
y después de presentarse y decirme que era de Veracruz, empezó a meterme la
mano por detrás del pantalón, jugando con mi culo y manoseándolo
eróticamente con sus grandes manos, sentía sus dedos rozar con mi esfinter y
lo mejor de todo que lo estaba haciendo en un lugar publico. Sentía como sus
dedos jugaban en la entrada de mi culito y no aguanté mas y lo invite a mi
hotel, su aspecto de chacal era lo que precisamente me excitaba, sus grandes
manos y sus grandes pies, que indicaban que debería tener una tremenda y
gigante verga.
Llegamos al hotel y nos túmbanos en la cama, el empezó la acción, removimos
nuestras ropas y se fue directo a darme una de las mamadas de culo mas
extraordinarias que me hayan dado jamás, me metía los dedos, mordisqueaba
los labios de mi culo, yo no aguantaba, y cuando le agarre la verga casi me
desmayo, era una cosa gigante, preciosa, una de las vergas mas bonitas que
he visto en mi vida, la empecé a chupar locamente, a darle lenguetazos en la
cabeza, era muy difícil metermela toda en la boca debido a su enorme grosor
y longitud, mientras tanto el seguía lamiendo mi culo, y metiendome los
dedos, y de repente sin avisar ni nada siento un chorro caliente de esperma
inundar mi boca, neta que sus mecos estaban deliciosos, estaba en la misma
gloria con ese cachondo chacal vergudo y experto en hacer sentir a un hombre
como una puta. No obstante de su corrida, su verga quedo tiesa y puso mi
piernas en mis hombros y empezó a meter la rica cabeza a mi ya dilatado ano
mientras me acostumbraba a su grosor, el me chupaba literalmente el cuello,
la cara las orejas y me daba lenguatazos salvajes, parecía un animal, de
repente, me dejo ir de un solo golpe el tremendo vergon hasta sentirlo en el
fondo de mis entrañas, el solto un gemido y me dijo: putito, me estas
quemando la verga con tu culito lo tienes muy calientito y apretado,
te voy a meter hasta los huevos. Yo solo gemía el placer era inmenso, le
pedía que me la diera toda, que me abriera mas el culo, que me lo llenara de
mecos calientes, sentía como sus vellos públicos rozaban la entrada de mi
ano abierto totalmente por ese monstruo gigante, el veracruzano se movía en
circulo dándome hasta la ultima pulgada de su rico pito, mientras me besaba
apasionadamente y balbuceaba todo tipo de obscenidades y de repente me dijo:
putito estas a punto de quedar embarazado, y con esa frase, sentí como se
hincho a aun más su gigante macana, y pude sentir hasta la ultima gota de su
leche inundar mi ansioso culo, mientras que con mi orgasmo terminaba de
ordeñar el pito del cha
cal, y al mismo tiempo le agarraba las nalgas
aferrándolo a mi. Se quedo unos instantes mas y me dijo: quiero que los
traigas toda la noche en tu culito, me beso y nos dormimos. En la mañana
siguiente cuando despertamos, ordenamos desayuno en el cuarto, mientras
llegaba nos metimos a bañar, cuando terminamos como el desayuno no llegaba,
empezamos a juguetear, y le di un tremendo mamadon en su rica vergota que
cada vez que la veía mas me gustaba, mientras el jugaba con mi raja, me
levanto, y me pidió que me sentara en ella, que me la comiera toda de frente
a él. Pues me fui sentando, mientras el me agarraba las nalgas y me las
abría para que no quedara nada fuera, me encantaba como con sus dedos jugaba
con mi culo, hasta que sentí como mi culo chocó con sus ricos huevos, en ese
momento dirigí mi mano hacia la entrada para comprobar que estaba la verga
hasta el tope, y no lo podia creer, pues con mi mano entera no lo podia
abarcar. De repente se me ocurrió que cuando llegara el desayuno le pediría
al mesero que nos tomara una foto en esa posición, el chacal acepto
gustosamente siempre y cuando le pasara una feria (no me dijo cuanto, le di
200pesos), y por mí pues como no vivo en Acapulco, no me daba pendiente. A
los 5 minutos de estar así tocaron la puerta, era el desayuno, mi chacal se
tapo, yo me puse una toalla y fui a abrir. El mesero era un muchacho como de
unos 25 años, que dijo llamarse David, muy guapito como de 1.72 de estatura,
moreno claro, barba de candado, delgado, y con unas pestañas gigantes que
los hacían verse muy atractivo, cuando paso al cuarto se quedo sorprendido
de ver al veracruzano en la cama, desnudo, la sabana solo le tapaba la
verga, pues se le veían los vellos y aparte se manoseaba la verga
descaradamente, como ofreciéndole al meserito, que se estaba poniendo medio
nervioso o medio caliente. Directamente sin pensarlo le dije: mira
David, yo se que son muy liberales aquí en Acapulco, y necesitamos tu ayuda
para que nos tomes una foto erótica, el dijo: no se preocupen,
no es la primera vez que me lo pide, pues destape al veracruzano, y
le di la cámara al mesero primero le pedí que me tomara la foto mamandole la
verga, el mesero se tentaba constantemente la verga, posteriormente me senté
en la verga del chacal dándole la espalda, y el mesero no salía de su
asombro al ver el tamaño del monstruo que me estaba comiendo por el culo. Nos
tomo fotos en varias posiciones, y cuando me puso en cuatro, mirando
fijamente al mesero mientras mi culo estaba totalmente abierto con la
vergota del veracruzano le dije: ¿no te gustaría ganarte una propina
extra?, se acerco, le baje la cremallera y brinco su verga, que si no
estaba tan grande como la del chacal, si estaba muy buena y gruesa,
circuncidada, (el chacal no tenia circuncisión). Yo estaba en la gloria,
mientras se la mamaba al mesero, este con sus manos me abría mas las nalgas,
como invitando al chacal a que la metiera mas allá del fondo., el mesero
gemía, mientras el chacal le decía: que rico se la come este puto,
deberías de probar su culito con esto intercambiaron posiciones y el
mesero me la dejo ir de golpe, sintiendo sus huevos chocar con los míos,
mientras se la mamaba a mi chacal, que me inundaba la boca con su precum, el
mesero pego un gemido y dijo: que rico culito mamita, ahí te va mi
leche, y me inundo el culo con sus calientes mecos, cuando se retiro,
el chacal me comenzó a mamar el culo tragándose los restos de la leche del
mesero, (es algo que todos deben de tratar algún día) y yo le limpie el
resto de los mecos al mesero con la lengua, mientras el chacal me la volvió
a meter de un solo golpe, al mesero se le volvió a parar, y el chacal le
decía, mira al puto insaciable, te quiere volver a sacar la leche, el mesero
metía uno de sus dedos en mi culo, abriéndolo mas aun de lo que estaba, yo
ya no aguantaba, quería venirme, en eso el veracruzano, pega un grito y me
mete la verga hasta el fondo llenándolo de leche y diciéndome putito
rico, que calientito tiene el culo que rico, y cosas así, el mesero
no aguanto y también me lleno la boca de su sabrosa esperma, haciendo que me
viniera en un orgasmo tremendo donde salían disparados mi mecos en todas
direcciones, ex
primiendo la verga del veracruzano. El mesero se cambio
inmediatamente, le di su propina y se fue, yo me quede con un recuerdito de
el, sus mecos en el culo, el veracruzano, se fue con sus amigos y también me
dejo el mismo recuerdito, no quise ni comer en todo el día para traer
guardada la leche en mi culo, que por cierto estuve goteándola todo el día.
La historia no acaba aquí, la próxima vez les voy a relatar la historia de
mi ultima noche en Acapulco, donde el chacal me presenta a sus amigos y la
pasamos fenomenal.
Por el momento es todo, espero que hayan disfrutado este relato que es 100%
verídico, me gustaría que se animaran a escribirme, prometo contestar.
Hasta la vista. alanntoledo (arroba) hotmail.com