Me puse al bordo de la cama con las piernas abiertas, y él se me abalanzó metiendo su verga en mi vagina de un solo empujón, al sentirla dentro empecé a tener orgasmos, no se cuantos, pero fueron varios minutos después sentí su eyaculación muy copiosa dentro de mí, en ese momento tuve otro orgasmo.
Este es un relato real de incesto que cometí con mi hermano.-
Cuando estábamos más jóvenes, al quedarnos solos en casa, teníamos escarceos sexuales y en alguna ocasión le permití que me introdujera su verga, nada más lo que es el glande, pasó el tiempo y dejamos de hacer esas acciones por temor a ser descubiertos y me daba miedo que me fuera a embarazar. Así fue pasando el tiempo.
Los dos nos casamos el mismo día cada quien con su pareja, en una boda doble, han transcurrido de eso como 20 años, pero el otro día, que fue sábado, hubo una reunión familiar en la casa de Carlitos, no se porqué nunca he podido llamarle Carlos, no obstante que ya somos adultos, a dicha fiesta fue casi toda la familia, exceptuando para no variar mi esposo, pero si mis hijos, me acompañaron, la fiesta con motivo del cumpleaños de mi cuñada Esther, estaba muy amena, pero en un momento nos dijo a Carlitos y a mí, que si le echábamos la mano con la cocina, para preparar unas botanas y lavar los trastos, a lo cual yo accedí de inmediato ya que siempre me he llevado bien con mi cuñada.
Total yo me puse a lavar trastos y en eso estaba cuando mi hermano se acercó y me dijo casi al oído:
– ¿Te acuerdas lo que hacíamos cuando estábamos chicos? Le contesté que no.- ¿Que hacíamos? Le respondí. Nunca me imaginé que se trataba de eso.
Se acercó más a mi oído y me dijo: el amor. A poco ya se te olvidó como te hacía vibrar, le respondí que no estuviera hablando de eso, porque nos podían oír y no era conveniente, Así sin más comentario me dijo: ¿sabes qué?, tengo muchas ganas de hacerlo contigo desde hace mucho tiempo, me gustaría que me dieras chance de hacértelo.
Al comentarme eso me excitó mucho, nada más de pensar en que me penetrara y me dejara ir sus mecos, le contesté que no era posible, ya que no se podía por las obligaciones que los dos teníamos con nuestras familias.- Contestándome que querer es poder y si tienes ganas lo podemos hacer, está en ti… Le respondí cómo lo haríamos y dónde, me dijo que hiciera como que iba a visitar a nuestra madre, y nos quedáramos de ver en el trayecto y de ahí nos iríamos a otro lado. Así lo acordamos, y a dos cuadras de la casa de mi madre nos encontramos a dos días de haberlo pactado en la fiesta, o sea el sábado.- Yo me subí a su carro temerosa de que alguien nos fuera a ver y desde los dos días anteriores me sentía muy caliente, nada más de saber que tendría relaciones con mi hermano.
Así y platicando de los deseos que teníamos si era correcto lo que hacíamos, como a diez cuadras de donde me levantó, me dijo agáchate porque vamos a entrar a un motel, agachándome, un poco temerosa que alguien nos pudiera descubrir.
Entramos al cuarto y al cerrar la puerta sin mediar palabras me dio un beso que tenía tiempo de no sentir, ya que la relación con mi esposo sexualmente no es satisfactoria, eso me excitó bastante y con sus manos me tomó los pechos acariciándomelos, al mismo tiempo que me desnudó bajándome el cierre del vestido quedándome únicamente con mis pantimedias y el brassier, para ese momento ya estaba muy caliente, y por encima de su ropa le frotaba su verga, estaba tan caliente, que le bajé el cierre de su pantalón y le agarré su verga, y no es por nada, pero la tiene el doble de gruesa y larga que la de mi marido.
Estábamos tan, pero tan calientes que sentí como estaba de humedecida mi vagina, y yo misma me quité mi pantaleta y me puse al bordo de la cama con las piernas abiertas, y él así con sus pantalones puestos, con su verga fuera se me abalanzó metiéndola en mi vagina de un solo empujón y al sentirla dentro empecé a tener orgasmos, no se cuantos,
pero fueron varios y como a los cinco minutos Carlitos me preguntó si se podía ir dentro de mí, le contesté que sí que no había problema y al momento sentí su eyaculación muy copiosa, en ese momento tuve otro orgasmo.
Pasaron unos veinte minutos de estar platicando, de que nuestras parejas no nos atendían adecuadamente y en eso me acarició con sus dedos nuevamente mi vagina y otra vez lo hicimos, pero esta vez totalmente desnudos gozando como animales este nuevo coito. Así fue transcurriendo la mañana y tarde y lo hicimos como cuatro veces todas muy placenteras, y por este sábado se acabó nuestro disfrute, ya que tuvimos que regresar a la realidad y me acercó lo más que se podía a la casa.-
En este momento que es jueves, estoy mirando al techo acordándome de esta vivencia y la verdad me gustó tanto que estoy esperando que se le ocurra a mi hermano hablarme para tener otra sesión como la que tuvimos.
Ojalá que me llame. Porque nomás de imaginarme ya estoy mojada.
Autor: LET
Delicioso iniciar con las hermanas,me paso en la pubertad de ella y mi adolescencia,,,ya de adulto aun me éxito al recordar
Yo no tengo hermanos pero una hermana deliciosa así seria hermoso
Riquisimo..
Roger Mtez: cuenta bro !!
Trata de cogerla por detrás, es mas divino para los dos y eso les permitirá tirar mucho mas tiempo. Los felicito
Buenísimo
Qué bueno que lo disfrutaste y ojalá lo vuelvas a repetir Ami me pasó algo igual con dos de mis hermanas cuando estábamos pequeños y después de tiempo ya grandes y casados lo volvimos a revivir y fue una gran satifaccion
Que buen relato logró sacarme una erección mientras lo leia , yo también tuve alguna vez un encuentro sexual con mi medio hermana.
hOLA. me gusto tu relato. yo tambien tengo alguno colgado de hermanos.
Excelente relato
LA VERADAD ES MUY RICO TENER UNA HERMANA ASI, COMO NO TE CONOCI ANTES ME HUBIERA GUSTADO………MUCHO
que rico y placer eres mujer,ojala tuviera una hermana como tu y yo te haria el amor todos los dias tanto que te dejaria embarazada mmmmm