Algunas mujeres cuando le acaban dentro de la vagina uno puede ver como le chorrea el semen en su rajita semiabierta, y unas pocas en la misma situación no se les cae una gotita de leche, este es el caso de mi mujer.
Este es mi segundo matrimonio y con el paso de tiempo el sexo con mi mujer se fue achatando, con lo cual para poder tener sexo siempre pensaba en fantasías, las mas habituales eran, que la violaban; que de vacaciones nos emborrachábamos y alguien o algunos se la cogian. Quizás estos pensamientos morbosos tiene su origen en los cuernos que me puso mi ex pareja.
Lo cierto es, que sumado a esto buscamos un niño y no logramos el embarazo, el medico nos sugirió que por tener mas de 40 años tenemos que tener mas sexo, que tratemos de motivarnos con películas, yendo a bailar e incluso yendo a boliches swingers, y aquí es donde comienza la historia.
Convencí a mi mujer de ir a un boliche swinger por el lado de la curiosidad, y asi es que un sábado no arreglamos bien y fuimos hacia alli, a poco de estar se nos acerco una pareja de unos 50 años que eran muy educados, agradables y nos contó como era la movida del lugar. Ese dia vimos de todo, desde competencia de gangbang a tres mujeres, intercambio tríos etc, nosotros solo miramos y sociabilizamos con esta pareja y yo particularmente converse en un momento con un muchacho de un grupo de solos que se encontraban siempre en este boliche para tratar de enganchar algo, según me conto.
Ya esa noche me la cogi como loco pensando en lo que le harian a mi mujercita..
Ella al ver que aumento un poquito nuestro libido decidio seguir llendo hasta lograr que yo le haga crecer su pancita,
Junto con el paso de los sábados fui entrando en confianza con la pareja de soledad y Gonzalo y le conté a Sole cual era mi morbo a lo cual ella dijo que sabia como ayudarme, y así fue que ese sábado nos invito para que fuéramos a su casa a seguir la noche o mejor dicho ya la madrugada, así fue que partimos siguiéndolo ellos, otra pareja que no conocía y a cuatro muchachos del grupo de los solos que yo había conocido el primer día. Al llegar tomamos un champagne, hacíamos bromas subidas de tono, seguimos bebiendo en un momento dado la pareja que no conocíamos se fue hacia uno de los dormitorios y entonces Soledad aprovecha para darle otra copa a mi mujer que por lo que supe después no solo era champagne.., a partir de ahí mi mujer un poquito borracha pero a la ves excitada empezó a bailar como loca con uno de los muchachos que no tardo en aprovechar la situación para empezar a tocarla sutilmente y luego de apoco, la fue besando hasta el punto de que en unos minutos ella estaba en la alfombra de la sala con sus piernas gorditas abiertas y el metiendo mano por debajo de su bombacha sin importarle que estuviéramos todos mirando, ella por momento lo quería parar, pero a la vez le pedio mas, así fue como poco a poco le bajo la bombachita y ya con su verga dura se la empezó a coger duro, viendo el dolor de la espalda en el piso de mi mujer este alcanzo un almohadón y lo puso debajo de su colita, con lo cual la espalda no le dolía, pero la concha le quedaba mas expuesta para sus ensartadas, al cabo de unos 10 minutos este muchacho acabo dentro de su conchita hasta la ultima gotita, para esto ya tenia cerca a los otros tres solos que también querían participar de la fiesta con mi mujer, hasta este dia ella solo había tenido mi pija y hoy ya veia que la iban a dejar abierta como una flor. Yo mientras tanto disfrutaba junto con Ramon y Sole del espectáculo
asi fue uno tras otro la fueron cogiendo le chuponeaban las tetas, el cuello y uno tras otros la fueron llenando de semen, cuando uno salia otro ya entraba, e incluso alguno salio sin acabar dentro y dejándole el lugar a su colega mientras se masturbaba para llenarle la cara y el pelo de leche. Así al menos unas tres veces todos se descargaron dentro de mi mujer
luego de esta faena mi esposa se duerme en la misma posición sobre el piso entonces Sole le pidió a los muchachos que me ayudan a llevarla a su habitación donde también me dijo que nos quedáramos, ya que ellos iban a despedir a los muchachos, a la otra pareja (que no podía creer lo que se había perdido) y luego cuando mi mujer estuviera repuesta nos iríamos,
yo me quede en la habitación, cerré la puerta y vi a mi mujer con las piernas abiertas, las manchas de leche en su cara y en sus pelos, los moretones de tantos chupones que le habían dado, la concha inflamada, toda irritada de tanta pija, ante este espectáculo se me paro la verga y la taladre como para lastimarle aun mas su conchita, no sin antes habérsela chupado a conciencia y tragándome así toda esa leche que ella supo guardar sin perder siquiera una gotita
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