Amor Filial Hetero, Hijastra y Padrastro. Samantha era una chica de 18 años de un culo hermoso y tetas grandes muy bien formada, sin contar esos ojos verdes y labios carnosos.
Hace unos años los padres de Samantha decidieron divorciarse. Un par de años más tarde, la madre de Samantha encontró una nueva pareja, un hombre mucho más joven que ella y más cercano a la edad de Samantha.
Él vio a Samantha crecer y durante ese tiempo, veía a esa mujer con un cuerpo delicioso y mientras más desarrollada estaba más ganas de cogerla y meterle la polla tan duro como para hacerla gemir y llorar, imaginaba su conchita rosita y mojadita deseando que la penetrara.
Una noche de viernes Samantha preparaba su pequeña pijama para tomar una ducha e ir a dormir, ella sabía que su padrastro la deseaba pues ya había visto ese enorme bulto y su mirada clavarse en sus tetas al tener una blusa escotada… Y le encantaba
Samantha: Hola papi -dijo con picardía saludando a su padrastro-
Javier: Hola hermosa ¿como te fue hoy? -Dijo su padrastro mientras le miraba ese rico culo-
Samantha: Uy me fue súper mal me he lastimado un pie y no puedo caminar muy bien necesito tu ayuda
«Samantha» : *No podía evitar imaginar a ese hombre penetrándome duro dándome verga como se la da a mi madre, pero el cargo de conciencia no me dejaría*
Javier: Claro preciosa ven, déjame ayudarte -Dijo mientras fingía que accidentalmente rozaba su verga semi dura mientras intentaba cargarla-
Samantha: Uy jajaja que fue eso papi
Javier: Perdon nena no era mi intención
Samantha: jajaja descuida papi me encantó eso
Javier: Ah si? Quieres que lo repita?
Samantha: Uff si papi que rico
Javier recostó a Samantha en la cama acomodándola en cuatro y empezó a simular que la penetraba mientras ella daba pequeños gemidos de placer al sentir esa polla dura
Javier: eres una niña mala amor ¿te gusta?- Dijo mientras le bajaba las braguitas empapadas-
Samantha: Si papi me encanta, ya métemela dame duro soy tu putita amor
Javier: Eres toda una puta amor me encantas
Samantha: ahhh siii ahhhh mmm duro ahhh ahhh si si ahh
Javier tomó de la cintura a su hijastra para penetrarle ese culo tan rico y apretado, le metía la verga sin parar una y otra vez desquitándose todas esas pajas que se hizo pensando en ella o cuando la espiaba mientras tomaba duchas…
Antes de terminar en una esplendida corrida en su boca Javier escuchó los pasos de su esposa por el pasillo buscando a su marido o a su hija…
Continuara…