Me dio por detrás, era riquísimo pues nunca lo había hecho y de una me rompió el culo que era virgen, primero me dolía muchísimo pero cada vez que entraba y salía me dolía menos y me gustaba más, cambiamos de posición, ahora él estaba abajo y yo cabalgaba como loca, ahí fue donde sentí un orgasmo riquísimo y caí rendida. Ese día fui primeriza en muchas cosas. Fui infiel por primera vez.
Hola amigos, mi nombre es «Claudia» Quiero contarles la primera vez que e fui infiel a mi esposo…
Soy una mujer casada de 35 años cuerpo muy bueno pues toda mi vida he practicado Karate (en la escuela de mi marido). Soy blanca, cabello castaño oscuro, ojos grandes color miel, soy de estatura media 1,63 pero aunque yo siempre he sabido que mi trasero es bonito, me he dado cuenta que aun hace que alguno que otro chico vuelva la mirada…
Bueno como les decía esta es la historia de como le fui infiel a mi marido por primera vez, por que ha habido más, claro que todas con el mismo chico que por cierto fue mi alumno y en algunas cosas mi maestro…
Esto fue en un torneo en un puerto cerca de donde somos, al ser un sitio turístico todos querían salir a los antros del lugar y mi esposo con sus juntas después de torneo llegaría tarde a la habitación así que decidí salir a dar una vuelta por el hotel y sus alrededores.
Además que el hotel estaba pegadito a la playa así que me fui de turista, al salir vi a todos los jóvenes que esperaban un taxi para ir a la disco y otros preferían caminar pero vi que faltaba uno más no le di importancia imagine que ya estaría con alguna chica, seguí hacia la playa y para mi sorpresa lo encuentro a él acostado en una silla playera viendo hacia el mar, yo curiosa pregunté que hacía tan solo, y él sin voltear solo dice:
«Esperándote mamita»
Yo con solo escucharlo decir eso sentí un calor por todo mi cuerpo (como mujer casada no estoy acostumbrada a escuchar eso de un chico de 20 años)… Al voltear se le cayó la cara de la vergüenza al enterarse que era yo.
Solo le dije que no se preocupara y me senté en la arena, él al instante jaló otra silla y la puso junto a la mía y nos acostamos a ver las estrellas, pero yo sentía su mirada fija hacia mí y sus movimientos accidentales que tocaban mi cuerpo y eso me estaba poniendo muy excitada lo que me hizo voltearme boca abajo para que no notara lo duro que tenía los pezones, pero en lugar de eso solo sentí su mano recorriendo mis nalgas a lo que yo solo respondí volteándolo a ver y sin dejarme decir palabra me besó en los labios.
Cuando dejó de besarme solo me dijo:
La deseo desde la primera vez que la vi…
(Dirán que estoy loca pero el escucharlo hablarme de Usted me ponía más caliente) le dije que si, que fuéramos a un cuarto pues estaría sola hasta tarde y así fue, de camino al cuarto él me abrazó y sus manos apretaban mis nalgas y me decía que le encantaba mi «culo», al llegar al cuarto solo necesitó un pequeño empujón y caí de espalda en la cama con él encima…
Me besaba metiendo su lengua en mi boca y me decía lo deliciosa que estaba y cuanto me deseaba.
Puso sus manos sobre mi pecho y apretó mis pezones al darse cuenta que estaban duros. Rápido me quito el brasier y empezó a besar mis pezones. En ese momento me puse a gemir de placer y él empezó a pasar su lengua por ellos y de un jalón bajo la falda, dejándome solo con un pequeño tanga él me miró a los ojos y agarró por un lado el tanga y lo bajó y lo sacó.
Yo ya me encontraba mojada. Entonces él se levantó y rápidamente se desnudó, dejándome ver una verga, Dura tiesa y llena de la energía de un chico de 20 años, me mojaba más me ver lo que me esperaba.
Me levantó las piernas, y me las puso en el filo de la cama, de tal manera que él de rodillas, tenía mi sexo en su cara.
Sacó su lengua y tocó con ella mi clítoris, empezó a besarlo y me puse a gemir como una loca, jamás había sentido una sensación tan rica, él seguía besándolo, y dándole con la lengua e iba metiendo la lengua dentro de mi sexo.
Le dije que eso es maravilloso, jamás he sentido lo que hoy estoy sintiendo contigo.
De pronto, se levantó sobre mí y me puso verga frente a mi cara y me la metió en la boca. Yo me puse a acariciarla con los labios, primero muy suave, después con la lengua, mientras con las manos acariciaba sus huevos.
De pronto se movió y sin decir palabra, me la metió con fuerza, empezamos a follar como nunca lo había hecho, como con mi esposo hacía mucho tiempo que no follábamos.
En ese momento él me pidió ponerme en cuatro y me dio por detrás, me parecía riquísimo pues nunca lo había hecho en esa posición pero el maldito sin avisarme se detuvo y de una me rompió el culo que era completamente virgen…primero me dolía muchísimo pero cada vez que entraba y salía me dolía menos y me gustaba más…
No aguanté mucho y cambiamos de posición, ahora él estaba abajo y yo cabalgaba como loca, ahí fue donde sentí un orgasmo riquísimo y caí rendida sobre él… Después de eso nos bañamos juntos.
Ahí volvió a darme sexo anal riquísimo…
Ese día fui primeriza en muchas cosas… Fui infiel por primera vez.
Tuve sexo oral y anal por primera vez. Pero desde ese día Jorge se queda hasta la última clase y nunca falta a un torneo…
Pero esas son otras historias que contaré después…
Autora: Claudia