Me fue acariciando, besando y me sentía excitada, se subió sobre mí y comenzó a penetrarme, me dolía demasiado, mi coñito estaba demasiado estrecho y tenso a la vez porque era la primera vez que sería follado. Respiré profundamente y sentí como esos 20 cms me atravesaban, gemía como una loca, poco a poco fue aumentando la velocidad, ya no existía el dolor, ahora era todo placer, podía sentir como entraba y salía. Gemía como una verdadera loca, me sentía demasiado excitada.
Esta historia es cierta, sucedió cuando yo tenía 18 años. Mi nombre es Anahi y mi hermano es algunos años mayor que yo. Para que se hagan una idea David tenía 24 años, es muy guapo. Mis amigas siempre se quedaban mirándolo y eso él lo notaba. Mide 1.80 es de contextura atlética, cabello castaño, ojos pardos, es un hombre muy lindo. Piernas y brazos fuertes, ya que practica tenis.
Yo soy algo bajita, mido 1.65, blanca como la leche, ojos color miel, cabello castaño claro, y bueno de trasero bien duro y firme, debo confesar que lo tengo bastante tonificado y mis senos son del gusto de los chicos, redondos, firmes, son de talla 36b.
Todo comenzó cuando David llegó de su viaje de intercambio estudiantil desde Madrid. Llegó más bello que nunca, había pasado dos años lejos de casa. Me quedé atónita cuando lo vi, parecía un dios griego que llegaba a mi casa y bueno yo ya estaba bastante crecidita, los dos nos sorprendimos mucho al vernos. Recuerdo que dijo: huyy hermanita que grande y linda estás, a lo que respondí y tú estás muy guapo hermanito. Nos abrazamos y fue increíble, sentí que casi me destrozaba los huesos con ese abrazo tan apretado. Sentía como mi respiración y mi corazón se agitaban, me di cuenta que el también lo notó, porque me enseñó una sonrisa pícara.
A las semanas siguientes mamá debió de salir de viaje por asuntos laborales así que tuvimos que quedarnos solos en casa por 10 días. La idea de estar sola con mi hermanito me daba morbo, era todo un espectáculo verlo salir de la ducha así todo mojado solo con su toalla o verlo bajar las escaleras en la mañana al desayuno solo con su bóxer. El día en que mamá se fue nos levantamos temprano para despedirnos de ella y desearle buen viaje. Cuando cruzó la puerta miré a mi hermanito con cara de pereza y le pedí que preparara el desayuno. Yo estaba solo con mi pijama que era una camisa larga que encontré en la noche y él con su bóxer. Lo miré con cara de deseo y él notó que no era una mirada habitual, se sonrojó un poco al verme así y se puso a preparar el desayuno.
Pasaron las horas cada uno salió de casa y nos encontramos ya en la noche, nos sentamos frente a la tv a ver una peli, yo ya en pijamas, una camisa de raso negra muy sexy y corta y él aún estaba vestido. Me senté a su lado en el sofá. Era una peli de terror. Me asusté mucho, así que cuando aparecían escenas de miedo me escondía tras él y me aferraba a su pecho. Él se reía de mí y me decía tranquila hermanita si no sucederá nada. Y luego me dijo mejor dejemos la peli hasta acá porque tienes mucho miedo. ¿Por qué no hacemos otra cosa? Esa propuesta me pareció interesante, apagamos la tv, pusimos algo de música y nos tomamos un par de cervezas mientras charlábamos.
Comenzamos a hablar de sus novias y luego me contó poco a poco de sus experiencias, ya más en lo íntimo con ellas. Luego me preguntó si o ya había estado más íntimamente con algún chico, la verdad me sonrojé mucho, levanté mi mirada y no salió palabra de mi boca, sólo negué con la cabeza. El se rió y me dijo: ¿huyyyy hermanita y eso? Cómo aún no has estado con algún chico. ¿Tu novio estuvo ciego o qué? Si eres demasido bella. Si no fueses mi hermana de seguro intentaría conquistarte y estaría encantado con ser tu novio y que la pasemos re bien juntos. Ese re bien lo dijo en tono tan sexy que me estremeció.
Ya íbamos por la quinta cerveza creo y yo ya estaba demasido mareada, pero sus palabras aún giraban en mi mente, la idea de estar con mi hermano me encantaba y excitaba a la vez. No recuerdo cómo, pero se nos ocurrió bailar, jajaja era muy divertido porque no podía mantenerme en pie muy bien, pero bailamos salsa y luego en la estación radial pusieron música romántica. Sólo me miró, me tomó de la cintura, me acercó a él y bailamos. Me sentía tan bien que puse mi cabeza en su pecho, podía sentir los latidos de su corazón y su respiración, eso me hacía sentir muy apacible. Poco a poco me acercó más a su cuerpo y pude sentir lo dura que tenía su verga, la sentía en mi abdomen como una estaca.
Levantó mi cabeza de su pecho y me miró fijamente con una mirada tierna y a la vez de lujuria, bajó su cabeza, levantó mi mentón y depositó sus labios en los míos. Me dio el beso más exquisito que nadie me dio antes. Era un beso tierno y de pasión, sentía como si me quedase sin aire, como si ya no pudiese respirar.
En ese momento podía desvanecerme, pero no lo hice. Acarició mi cabello y me dijo lo bella que era, que desearía que no fuesemos hermanos, que le encantaba como era en todos los sentidos, que era perfecta.
Acarició mi rostro volvió a besarme apasionadamente y me susurró al oído si es que quería que se detuviera. Yo al fin hablé y le dije: No, no te detengas. No sabes cuanto tiempo te he deseado. David quiero que seas tú, sólo tú, el primer hombre, que me hagas tuya lo deseo con ansias, lo necesito, te necesito.
David me miraba con cara de asombro no podía creer que fuese yo la que dijiese esas cosas, sólo me sonrió y me dijo que si que el también ansiaba estar conmigo, deseaba poseerme como su hembra. Me tomó en sus brazos, subió las escaleras y me llevó a su habitación, me recostó en la cama, poco a poco se sacó su camisa y sus jeans hasta quedar desnudo, que espectáculo tan maavilloso, levantó mis brazos y me sacó la camisa. Ahí estábamos los dos desnudos frente a frente, mi cuerpo se amoldaba al suyo, se quedó contemplándome y me besó desde los labios hasta mis pies. Sentía como recorría mi cuerpo con sus besos, era una sensacion deliciosa, me sentía extasiada. Luego me dijo que sería muy cuidadoso porque no quería dañarme, su verga en ese mmento me parecía monstruosa, de 20 cms, además de gruesa.
Tenía miedo, pero poco a poco me fue acariciando, besando y me sentía excitada, se subió sobre mí y comenzó a penetrarme suavemente, me dolía demasiado, mi coñito estaba demasiado estrecho y tenso a la vez porque era la primera vez que sería follado. Respiré profundamente y sentí como esos 20 cms me atravesaban, gemía como una loca, poco a poco fue aumentando la velocidad, ya no existía el dolor, ahora era todo placer, podía sentir como entraba y salía. Gemía como una verdadera loca, me sentía demasiado excitada. Percibí como besaba mis pechos, como mordía mis pezones y me encantaba. Luego me monté sobre esa verga que estaba demasiado erecta y me movía frenéticamente mientras él me tomaba de las caderas y me decía: Goza hermanita, goza, mientras me daba unas nalgadas suaves.
Podia notar como mis jugos escurrían, estaba demasiado mojada, luego me bajé y comencé a dar una mamada a esa verga, jamás lo había hecho antes, creo que lo hice muy bien ya que veía la cara de placer de mi hermano y escuchaba sus gemidos, no me cabía toda porque era demasiado grande y gruesa y luego hicimos el 69 que placer, que maravilla como lamía mi coñito, como jugaba con mi clítoris estaba en el paraíso.
Ambos jadeabamos de placer. Volvió a montarse sobre mí y me dijo: quiero acabar dentro de ti hermanita ¿me harías ese honor? Yo en ese momento estaba en mi clímax y grité: siiiii, dame tu leche hermanito, dámela en mi coñito, hazme tu hembra, hazme tu mujer.
Me penetró con tal intensidad que a los minutos acabó en mí, pude sentir como me inundaba con su leche, que exquisito, caímos rendidos los dos en la cama, yo me quedé dormida, ya estaba el día claro cuando desperté y él estaba allí en la cama a mi lado contemplando como dormía.
Trajo el desayuno a la cama y me dio un gran beso en la boca. Hora de comer princesita, a reponer energias, sólo me reí.
Luego me dijo lo maravilloso que estuvo, que había sido lo más increíble, que me amaba como hermana y como mujer, que me deseaba, que le encantaría poseerme una y mil veces.
Desde entonces que cada vez que podemos lo hacemos.
Ahora que ya tengo 23 años estoy en la universidad y mi hermano ya es todo un profesional, me mudé a vivir con él ya que la universidad esta en su misma ciudad, así que vivimos como pareja, no hay día en que no nos amemos, que no nos acariciemos ni no nos entreguemos el uno al otro.
Si ha de ser el mayor de los pecados y he de arder en el infierno lo acepto, porque amo a David por sobre todas las cosas, como hombre y como hermano.
En las vacaciones de verano nos vamos a otros países y podemos ser libres, somos una pareja de enamorados frente a los demás, pero frente a mi madre somos los hermanos más queridos.
Espero que les haya gustado mi historia.
Autora: anahi29
Hola es algo muy hermoso y tierno realmente fuiste muy explícita me encanto tu relato muy bueno además que eres una chica muy hermosa que mejor estar en las manos de un hermano felicidades a ambos si deseas puedes dejarme tu wassap al responder gracias
Hola bb me das tu whatsapp
Me das el whatsapp de tu hermano o si no te doy mi Instagram
Considero que el incesto es de lo más placentero, por ser prohibido. si bien yo tuve algo similar con mi hermana hace muchos años, que no fueron mas que toqueteos y unas que otras chupadas, es la experiencia más cachonda que he vivido, a pesar de estar casado. ¡qué envidia de los dos!
que rico sabes yo tambien lo hago con mi hermana y es fabuloso nunca e sentido tanto placer como lo tengo cuando cojo con mi hermana es fantastico los felicito a ambos por dejarce llevar
Excelente historia, una experiencia magnifica.
que rico a mi me paso lo mismo y seguimos