Hola amigos, me llamo Doménico y deseo compartir con Uds. Lo que transformo mi vida.
Tengo18 años y hace 3 meses llevo una relación con mi profesor de natación debo decirles que me va regio con las chicas, he tenido varias relaciones muy buenas con ellas, pero pasando a mi tema debo decirles que conocí a mi profesor en la academia y todo era normal hasta el día en que lo vi en la ducha y simplemente me impactó lo que vi.
Fue como si me hubiera hipnotizado, su pene era grande, grueso y hermoso y no podía dejar de mirárselo, felizmente no se dio cuenta sino qué hubiera pensado, nunca había tenido alguna atracción de este tipo a pesar que comparto duchas con mis compañeros de natación y en realidad lo veo de lo más normal, pero el día que vi a mi profesor en la ducha fue algo muy diferente y a partir de ese día buscaba el momento ideal para verlo ducharse, pero todo eso no pasaba a más que una travesura curiosa del momento, a pesar de lo mucho que me turbaba verlo así y tanto me turbaba que cuando en clases él se me acercaba me ponía nervioso, pero yo lo disimulaba muy bien y su sola cercanía me ponía (y aún me pone) muy caliente y no era para menos, verlo parado ahí con esa ropa de baño negra, tan chiquita y mojada que claramente marcaba su paquete que tanto me hacía poner a mil.
Lo cierto es que a pesar de todo esto, las cosas transcurrían de lo más normal, las clases siguieron su curso hasta que un día el profesor pidió voluntarios para ayudarle a pintar su departamento y como se podrán imaginar fui el primero en ofrecerme lo mismo que tres compañeros más, así que convenimos en encontrarnos en el departamento del profesor el día domingo a las 9:30 am, el lugar en mención estaba bastante alejado de donde vivo, pero eso no fue mayor impedimento para mí.
Ese día me levanté muy temprano, tomé un maletín con mis cosas y me dirigí al departamento del profesor para la labor que íbamos a realizar, en el trayecto me imaginaba como sería el lugar, y si acabaríamos temprano y cosas así hasta que llegué al lugar indicado, estaba situado en un tercer piso y llamé al intercomunicador, me contestó él y me pidió que subiera, cuando estuve en la puerta me dijo: "pasa ponte cómodo", él llevaba puesto solamente un pantalón corto de futbol y se veía muy bien, tan seguro, tan irresistible.
Mi profesor se llama Francisco, tiene 32 años, mide 1.82 más o menos y pesa unos 79 kilos creo yo, me dijo que era el primero en llegar y que esperara a que llegasen los demás, para hacer tiempo fui a su computadora a revisar mi correo y a ver algunas páginas de mi interés, en tanto que él a mi lado me mostraba otras páginas de varios temas como natación, deportes, mascotas y también una de porno que la pasó muy rápido pese a mis protestas, él dijo que era muy joven para eso y le contesté que veía varias páginas de esas lo que motivó y encendió mi morbo, pero había ido allí a pintar así que le pregunté donde me cambiaba para comenzar a pintar, pero él me pidió que mejor esperase a los otros que ya estarían por llegar, resulta que mis compañeros se tardaban mucho y el profesor ya se notaba molesto hasta que recibió una llamada de ellos donde le decían que no podían llegar, inclusive le dijeron que yo estaba con ellos a lo que el profesor les dijo: "ok otro día será".
Yo pude escuchar toda la conversación y quise protestar, pero él con un gesto me contuvo así que colgó y me dijo que se postergaba la jornada para otro día, que me podía marchar y todo eso, le dije que el trabajo lo podíamos hacer los dos, pero se opuso muy cortésmente así que me dispuse a apagar la computadora y marcharme no sin antes ayudarle a guardar las cosas de trabajo que había preparado, lo hicimos así y ya que había sudado algo le pedí su ducha y me dijo que no había
problema, así que una vez ahí me desnudé y comencé a ducharme cuando él entró y me ofreció un jabón muy bueno el cual acepté, me pidió disculpas por la intromisión y yo me sorprendí diciéndole que no me molestaba, al contrario si el deseaba podía ducharse conmigo.
No sé de donde saqué valor para decirle eso, pero el accedió y enseguida estaba desnudo junto a mí, le cedí el lugar para que se mojara mientras yo me jabonaba y el comenzó a jugar echándome agua riendo y yo disfrutaba del juego y no podía dejar de mirarle el pene, lo veía sin que se diera cuenta, pero a estas alturas ya poco me importaba eso, me cedió el lugar para que yo pudiera mojarme y entonces ahí muy sutilmente sentí rozar su pene junto a mí, seguí mojándome totalmente turbado y él se me pegó y sentí su pene entre mis nalgas, me abrazó fuertemente y yo "traté" de zafarme, más que zafarme era solo un mero trámite de mi parte, ya que lo que deseaba era que me apretara más fuerte y así lo hizo.
Realmente era un momento mágico para mí, entonces me dio vuelta y nos besamos tiernamente primero, luego con pasión, podía sentir su miembro sobre mi abdomen y me hizo tocarlo lo cual hice por varios minutos mientras nos besábamos, luego me bajé hasta tener su pene frente a mí, no podía creer que tenía frente a mí aquel hermoso pene y comencé a mamárselo como si se me fuera la vida en ello, tenía la experiencia de las mamadas que algunas chicas me habían hecho, pero esto era diferente, perdí totalmente la noción del tiempo, no se cuanto tiempo estuve mamándosela, quizás fueran minutos, horas, días, no sé, solo sé que podía pasarme toda la vida mamándosela.
La tenía grande, gruesa, y unos huevos de ensueño, él con un leve movimiento me levantó y me llevó a su cama y ahí nos acariciamos y nos llenamos de besos mientras que con sus dedos comenzó a explorar mi ano lo que me hizo arrancar un quejido involuntario, me puso boca abajo y comenzó a besar mi espalda hasta que llegó a mis nalgas, metió su lengua a mi ano, aquello me hizo erizar de pasión, nunca había sentido algo así ,mientras que su lengua hacía su labor, con sus dedos jugueteaba en mi ano, primero un dedo, luego otro y otro hasta dilatarlo y humedecerlo totalmente, entonces me puso boca arriba mirándome y colocó mis piernas en sus hombros, yo sabía lo que venía, sentía ya su enorme pene en la entrada de mi ano, tenía miedo, pero no quería que se detenga.
Me untó una crema y entonces trató de meterlo, le dije que era la primera vez, pero él ya se había dado cuenta de eso y muy suavemente comenzó a penetrarme, dolía mucho, pero ya no había marcha atrás, metía un poco luego se detenía y luego seguía penetrándome hasta que consiguió meterla toda, pude sentir sus huevos chocar en mis nalgas y entonces comenzó un galope rítmico a veces, desesperado otras, mientras que el placer apagaba el dolor, ya no pude aguantar más y eyaculé abundantemente lo que lo excitó mucho más haciéndole acelerar su galope hasta que pude sentir como me llenaba con su semen, aquello era increíble sentía que me moría y me iba al cielo, se echó sobre mí y nos besamos largamente, me preguntó si me había gustado y le dije que si, que lo había deseado desde el día en que lo vi en la ducha.
Nos volvimos a besar y estuvimos así abrazados mucho rato, me sentía relajado y feliz, supongo que así se sentirán las mujeres después de hacer el amor, ese día hicimos el amor dos veces más y me marché a mi casa alas 5: pm. Al día siguiente estaba nervioso, pero el día transcurrió tranquilo, solo al terminar la clase lo encontré en su oficina y entré a despedirme, Él cerró la puerta y nos besamos, el miércoles siguiente hicimos el amor en su oficina y me cito a su departamento el domingo, así lo hice y al llegar me dio una bolsa diciéndome, esto es para ti, al abrirla descubrí una minifalda, una blusa, una peluca negra no muy larga y una tanga chiquitita, al notar mi sorpresa me dijo que me lo ponga, que lo haga por él y me ayudó a vestirme y la verdad me gusta sentirme una mujer con &eacu
te;l.
Ya han pasado tres meses de esto y nos va bien, a veces hacemos el amor en la academia, pero es en su departamento donde la pasamos bien los domingos, una vez organizó una fiesta y llegaron unas 4 parejas todas gay y yo estaba ahí como su hembrita, incluso hizo que una de "ellas" me maquille muy discretamente, al mirarme al espejo me vi toda una mujer y era solo para él. También hemos tenido nuestras diferencias, hasta le fui infiel una vez, pero eso es otra historia que prometo contarles.
Cualquier comentario me lo pueden hacer llegar al mail que con gusto estaré contestándoles. Bye
Autor: Doménico domenico1560 (arroba) hotmail.com