Últimas historias

  • ¿Y, ahora qué…, tío?

    Mi tío Ignacio me citó en su despacho. Era un domingo, por lo que para la familia adujo que iba al despacho por motivos de trabajo; a mí me pidió que mantuviera la cita en secreto, quería saber en privado si yo tenía alguna explicación sobre el cambio positivo que había experimentado su hijo, desde […]

  • Mi madura de la preparatoria. Fantasia realizada

    Aprovechando su excitación la puse boca abajo, y moje mis dedos con sus propios líquidos y empecé a meterle el dedo de nueva cuenta en su culo, no iba a desperdiciar la oportunidad de desvirgar el culo de esta mujer, ella se quejaba un poco, metí dos dedos y me decía duele, pero sigue, escupí en su año, y lamía su panocha de vez en cuando, ella ponía su culo en pompa, era una postal inolvidable…

  • Qué será lo que quiere el negro V

    Estando el de pie, me incline de inmediato a mamar su verga o pipe como él decía. Empujó mi cabeza con su mano, por lo que aquella verga se hundió hasta mi garganta, me dijo trágatela completa, me dieron arcadas pero me deje hacer. Yo estaba de pie inclinado, con las nalgas paradas, entonces el acariciaba mis nalgas y mi ano con saliva, mientras yo chupaba aquella tranca.

  • Taxista vergudo

    Hola, quiero compartirles la siguiente experiencia. Soy de Sinaloa, Mex, y empezé con mis relaciones homosexuales apenas hace 6 años. Soy pasivo. Todo pasó con un amigo de la prepa, duramos sin vernos 4 años y cuando nos vimos, él me invitó a salir, él es casado, trabaja de taxista. Fue una noche inolvidable, nos […]

  • chupo cola

    Le chupo la cola y se la dilato

    Se la chupo y se la lleno de saliva ya que con eso empiezo a sentir como se le comienza a abrir y como le late el esfínter, así que empiezo a coger ese culito con mi lengua, cosa que la vuelve loca, luego le escupo el agujerito y le meto un dedo. De sólo […]

  • Se follaron a mi señora

    Andrea se acercó a Sergio y frotó su culito sobre el pene de mi amigo, el que sin demora, se abrió el cierre, levantó la faldita de mi mujer y empezó a frotarlo ahora sobre la concha depilada de mi mujer, luego mi mujer completamente desnuda y sentada sobre Sergio, comenzó a bajar sobre el […]

  • La mujer de mi cuñado

    Ella empezó a moverse circularmente para sentir mi pinga bien adentro, me volvió loco, empecé el mete y saca, se la sacaba para luego clavársela hasta el fondo y luego con más rapidez, hasta que me pegué fuertemente empalándola y ella reaccionó tomándome de las caderas para hacer más presión y quedar bien pegados y […]

  • En el cine triple XXX

    Mi mujer me gritó, quiero que me folle, no te das cuenta que tengo mucha hambre de polla, quiero que me follen bien de una puta vez, quiero correrme de verdad, tu polla es una mierda. Vete y que te jodan y olvídame. En ese momento el tío de mi izquierda me cogió del brazo […]

  • En un colegio de monjas

    El espectáculo de la jovencita y el hombre aquel me excitó de tal manera que me follé a Isabel con una violencia, como nunca. Le apretaba las tetas, estrujándolas hasta hacerle daño, y hacerle emitir gemidos de dolor y de placer al mismo tiempo. Un gemido de Isabel, me demostró que había llegado al orgasmo, […]

  • La novia de mi hijo

    Luego de tantas embestidas ella tuvo su orgasmo y sentí que yo me venía, le dije que se levantara y me chupara la pija, se agachó y tomándola con una mano se la colocó en su boca. Me la mamaba de maravilla, sentía un placer inmenso, mientras pensaba que la novia de mi hijo era […]

  • El adulterio de mi esposa

    La polla estaba encajada en el chumino de Beatriz al máximo de lubricación, yo estaba tan empalmado viendo como se follaban a mi amada esposa que tuve que hacer verdaderos esfuerzos para no correrme, aunque ellos si, ellos si que se corrieron, pude hasta ver como a Beatriz se le ponía la carne de gallina […]

  • Mi vecino el cubano

    Tenía toda la vagina llena de polla. No había un solo sitio que no quedara lleno por ese miembro tan impresionante. Cuando notó que estaba toda dentro, empezó un lento vaivén. Ahí si que no aguanté más, y a cada embestida que él iba dando cada vez más de prisa, yo respondía con un gemido […]