LA PRIMA MADURA
Fui al banco a cambiar un cheque y al anunciar el cajero mi nombre, ella se me acercó y me preguntó por mi origen familiar y me afirmó: -Yo soy su prima-. Intercambiamos direcciones y teléfonos y entablamos una buena amistad, nos prestábamos pequeñas sumas de dinero, yo le hacía reparaciones ligeras en su casa. […]