No podía aguantar más, y me levanté y la pegué contra la pared, clavándosela hasta el fondo, emitió un gemido muy sonoro, a la vez que me clavaba sus uñas en la espalda y sus taloncitos en el culo.
He venido leyendo las historias de esta sección desde hace 3 años, y ahora quiero contribuir con una de las muchas experiencias que he vivido gracias a mi trabajo en hostelería.
Había pasado más de 3 semanas sin comerme nada, por culpa de los compañeros de trabajo; cada vez que me veían hablar con una chica, empezaban las bromas:
– Hey otra vez atacando, joder no dejas nada para los demás. Cosas por el estilo, y así las chicas escapaban, y empezaba a desesperar, hasta que APARECIO.
Ese día tenía que sustituir al conserje que tenía libre. Llegué y en una hora había terminado el poco trabajo que había en aquella noche, y tenía por delante seis horas para aburrirme como una ostra. En eso que la vi volviendo con su amiga. Me quedé mirándola, me sonrió,
presentía que les caía bien, algo que se confirmó cuando me pidieron hacerse fotos conmigo.
Primero con la amiga y después para no hacer las poses iguales; la levanté y le hicimos la foto así, cargándola en mis brazos. Enseguida le dije que si tenía novio que no le enseñara la foto, se rieron y sin contestar se fueron dándome las gracias.
De mi parte empecé un juego en el ordenador dispuesto a matar el tiempo, cual fue mi sorpresa cuando la vi volver más preciosa que nunca: llevaba el pelo suelto que le llegaba a la cintura, descalza y con una camiseta blanca que le cubría lo justo. No llevaba sujetador así que los pechos imponían aun más. Pasó por la recepción y salió, tomando el fresco. Yo seguía en lo mío, bueno lo intentaba. A los 5 minutos regresó y se quedó en la puerta del
hotel ( tengo que decir que el hotel tiene 2 puertas para entrar y salir la de delante y la trasera, la de delante es generalmente para los de seguridad, los clientes entran por allí y salen por allí de noche. La trasera donde estaba es más lo que es recepción, facturación, etc..).
Así que estaba toda la noche solo. Sin pensármelo 2 veces, salí a buscar charla, estuvimos hablando de muchas cosas, de muchos temas, pero no podía apartar mi vista de sus pechos.
En un momento dado me preguntó si siempre estaba así de aburrido la noche, le dije que sí, que hasta las 6 de la mañana no va a pasar nadie. Entonces me preguntó:
– ¿Hay alguna cosa que te apetece hacer?
-A lo que yo respondo: -No, sin darme cuenta de la magnitud de la cuestión.
Pero menos mal que reaccioné, para poder dar un paso significativo. Vuelvo dentro porque ha sonado el teléfono, y me sigue. Después de colgar el teléfono, nos quedamos así mirándonos, la cogí de las manos, me sonrió, la besé, ella lo aceptó y nos besamos. La hice entrar en el back office, pegó un suspiro.
La senté en una silla y nos besamos con más ganas ahora, seguimos besándonos
largo rato, y con mis dedos me apoderé de sus pezones, pellizcándolos, besándolos, chupándolos, y fui bajando y ella abriendo las piernas hasta que me encontré el tanga más sexy y bonito que he visto jamás, seguí lamiendo encima de la tela, hasta que aparté la tela fina y apoderarme de toda su cueva.
Lamía, chupaba, metía mi lengua hasta muy dentro. Ella jadeaba muy abierta de piernas, y su cuerpo empezó a vibrar literalmente cuando rocé su clítoris, jugando con el con mi lengua. Sus muslos aprisionaron mi cabeza, muy fuerte, asi unos segundos, entonces
explotó en una corrida bestial, que puso toda la sangre de mi cuerpo en un solo sitio; en mi negra polla. La relajé despacio a base de besitos, lametones, mordicos por todo su cuerpo.
Se levantó y me hizo sentar y mirándome fijamente en los ojos se iba sentando en mi falo, y muy despacio, se la iba introduciendo en su encharcado coño. Se paró a la mitad un rato para besarme y chuparme la lengua. Cualquier gesto que hacía me fascinaba, hasta como cerraba los ojos.
No podía aguantar más, y me levanté y la pegué contra la pared, clavándosela
hasta el fondo, emitió un gemido mu
y sonoro, a la vez que me clavaba sus
uñas en la espalda y sus taloncitos en el culo. La fui bombeando con un buen ritmo, ni rápido ni lento. Sudábamos, devorándonos, y nuestros dientes se chocaban por la fuerza de los besos, contrajo los músculos de su sexo y me mordió y clavándome mas uñas y
talones. Se corrió abundantemente sin soltarme durante largo rato, y se fue relajando hasta seguir con el coito otra vez, y después de largo rato y al ver que no me corría (pocas veces lo hago, la verdad), me hizo salir de ella y se puso a hacerme la mamada más espléndida que recuerdo.
Chupaba, apretaba mis huevos hasta hacerme daño para enseguida meterlos en la boca y jugar con ellos, a ratos me mordía la base de la polla y recorría con su lengua hasta
la cabeza, algo que me hacía perder la cabeza. Luego chupaba con más fuerza,
sin dejar de masturbarme. Cuando se dio cuenta de que me iba a correr, se levantó y se sentó encima de mi polla, pero metiéndosela esta vez en el culo apretó con fuerza y descargué todo lo que tenía dentro. No dejó de apretar hasta que terminé de correrme.
Entonces se levantó rápidamente cogió el tanga se taponó el culo, se puso su
camiseta, me dio un beso y me dijo:
– Gracias ha sido….., ah y si no te importa voy a llevar un poco de semen
a mi amiga. Te diré si le ha gustado o no.Y se fue corriendo y dejándome perplejo.
A los 2 días la encontré y me dijo:
– Mi amiga te quiere conocer, si quieres nos podemos ver los 3 pero otro
sitio. Ya me dirás cosas. Vaya si les dije cosas pero eso para otra ocasión que ya me he alargado mucho.
Me gustaría recibir comentarios vuestros, tanto si os ha gustado o no.
GRACIAS Y BESOS .
PATRICK.
Autor: Patrick
papisco95 ( arroba ) hotmail.com