EL FRUTO DE NUESTRO ENCUENTRO
Apenas había anochecido en aquel invierno. El sol recién se había ocultado. Llamé a tu timbre y esperé a que bajaras a abrirme la puerta. Te besé en los labios y subimos a tu apartamento. En el trayecto intercambiamos algunas palabras sobre las actividades que habíamos hecho ese día. El lugar me recibió cálidamente, con […]